La metodología del indicador cumple los parámetros internacionales

El índice nacional de precios al consumidor (INPC) refleja la variación promedio de los precios de una canasta de bienes y servicios representativa de toda la población venezolana, explicó Magalis Figueroa, coordinadora del INPC por el Banco Central de Venezuela.

Este indicador, que elaboran mensualmente el Banco Central de Venezuela y el Instituto Nacional de Estadística, recaba alrededor de 300.000 precios de bienes y servicios, para lo cual se visitan 22.000 establecimientos en todo el país. Así lo explicó la especialista en el programa Con el país, espacio del BCV que se transmite todos los martes, de 1:00 a 2:00 pm, por el Canal Clásico de Radio Nacional de Venezuela.

“Son las familias, a través de la encuesta de presupuestos familiares las que contribuyen a establecer el peso o predominancia de los artículos que se miden en este indicador, así como la diversidad de establecimientos que permiten levantar los precios”, señaló Figueroa. 
Actualmente se esta ejecutando la IV Encuesta Nacional de Presupuestos Familiares, un estudio estadístico nacional que permitirá conocer los cambios en los patrones de consumo de los hogares venezolanos, actualizar la canasta de bienes y servicios del INPC y abrirá la posibilidad de que se elabore un índice de precios al consumidor por estado, destacó Figueroa.

Agregó que hay más de 200 tipos de lugares de venta a los que acuden los consumidores y usuarios. Se incluyen abastos y bodegas, cadenas de supermercados, mercados libres y periféricos, panaderías, farmacias, clínicas y consultorios médicos, establecimientos solidarios (Mercal y Pdval), colegios, clínicas, tiendas por departamento, boutiques, zapaterías y talleres mecánicos, entre otros.

Los investigadores de campo del INE y del BCV acuden diariamente a estos locales, y deben también registrar variables como la disponibilidad del producto o servicio para el consumidor y las ofertas o promociones sobre el precio normal  “Estas y otras circunstancias pueden ser diferentes en cada ciudad donde se levanta la muestra”, explica la funcionaria del BCV.

Para elaborar el INPC, el Banco Central y el INE recaban información en 10 grandes ciudades (Caracas, Barquisimeto, Maracay, Valencia, Maracaibo, Maturín, San Cristóbal, Barcelona-Puerto La Cruz, Ciudad Guayana y Mérida) y en 74 localidades agrupadas en el dominio “Resto nacional”, que incluye ciudades medianas y pequeñas, así como áreas rurales. Anteriormente, sólo existía el seguimiento de los precios en las áreas metropolitanas de Caracas y Maracaibo.

De acuerdo con clasificadores de aceptación internacional, los bienes y servicios que integran la canasta de muestra del INPC se agrupan en Alimentos y bebidas no alcohólicas, Bebidas alcohólicas y tabaco, Vestido y calzado, Alquiler de viviendas, Servicios de la vivienda,  Equipos del hogar, Salud, Transporte, Esparcimiento y cultura, Servicios de educación, Restaurantes y hoteles, Comunicaciones y Bienes y servicios diversos.

Controles de calidad

La información de los precios lleva un exhaustivo análisis que incluye no sólo tomar el precio en los establecimientos, sino también el entorno en el cual se realiza la comercialización. Esto incluye la evaluación de la disponibilidad del producto a los consumidores, situaciones de abastecimiento, ofertas o promociones sobre el precio normal del producto y otros aspectos.

Una de las formas de conocer los precios es la compra efectiva de varias canastas de alimentos, en distintos establecimientos, sin identificarse como trabajadores del INE o del BCV, de manera de contrastar los precios que efectivamente se transan en los mercados con los que están en la base de datos. 

Figueroa destacó que la importancia del INPC es que ahora los venezolanos cuentan con una herramienta que permite realizar análisis por los estados que actualmente son medidos en este indicador. Quiere decir que es más representativo y permite diseñar políticas públicas que reconocen las particularidades de cada región.