Judith Valencia (Venezuela) en las jornadas de Economía Política en el BCV

La actual crisis estructural que padece el sistema capitalista mundial requiere también de una crisis política, a fin de desbordar los límites legales de la institucionalidad y propiciar un reacomodo de los factores de producción que permita subsanar los graves problemas que han surgido en el tiempo actual.

La reflexión corresponde a la profesora de Economía de la Universidad Central de Venezuela (UCV), Judith Valencia, quien advirtió el carácter cada vez más amenazante que ha mostrado la política exterior estadounidense, orientada a impedir que haya una suplantación del sistema capitalista por un nuevo ordenamiento de mayor igualdad social. 

“Si tomamos elementos clásicos de pensadores como Karl Marx y, más recientemente, István Mészáros, nos podríamos encontrar en la reelaboración de un piso teórico de la economía política, en atención a la crisis de la política que pretende desplegar los Estados Unidos a raíz de la crisis actual y estructural que sufre la lógica del capital”, aseguró Valencia durante su intervención en las Jornadas Permanentes de Economía Política Latinoamericana, realizadas en el Banco Central de Venezuela los días 11, 12 y 13 de noviembre.

Es un llamado a la “reflexión entre adultos militantes”, pues existe “una nueva ofensiva norteamericana que pretende jugar jaque mate con la política de los Estados. En esta crisis de la política colocan nuevos obstáculos, con la idea de recomponer las condiciones mundiales en las que el capital pueda de nuevo ser rentable”.

En opinión de la catedrática venezolana, “sucede que el capital productivo tiene que apropiarse de los territorios, con sus recursos y pobladores. Por eso el llamado es a ‘cultivar nuestro propio jardín’, en el sentido de hacernos soberanos, satisfacer nuestras necesidades y desplegar las potencialidades que tenemos como pueblo, como lo plantean los valores de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA)”.

La idea, según Valencia, es cooperar y complementarse “a través de un intercambio compensado, respetando nuestras soberanías y generando espacios geopolíticos emancipatorios”.