El Índice de Remuneraciones de los asalariados (IRE) presentó una variación del 6,9% en el tercer trimestre de 2012, menor a la observada para el trimestre anterior (9,2%) y en el mismo trimestre del año 2011 (12,7%).
Entre las principales causas que explican el comportamiento del indicador destaca el segundo ajuste del Salario Mínimo Nacional, el cual pasó de Bs. 1.780,45 a Bs. 2.047,52 (GO N° 39.908, de fecha 24-04-2012). Esta resolución fijó un incremento de 30,0% en el salario mínimo de las trabajadoras y trabajadores de los sectores privado y público, efectivo en dos incrementos iguales a 15,0%, vigentes a partir del 1° de mayo y 1° de septiembre de éste año, respectivamente.
Asimismo, se distinguió que las empresas privadas comenzaron a incorporar las disposiciones de los artículos 131, 190 y 192 de la nueva Ley Orgánica de los Trabajadores y Trabajadoras (LOTT. GOE N° 6.076), relacionadas con ajustes en los pagos de utilidades, vacaciones y bono vacacional.
Por otro lado, a partir del 1° de julio del presente año, los docentes adscritos al Ministerio del Poder Popular para la Educación (MPPE), recibieron el tercer ajuste salarial (8,0%), establecido en la VI Convención Colectiva de los Trabajadores de la Educación 2011-2013. Cabe recordar que dicha convención estableció tres incrementos salariales para los trabajadores docentes de educación básica, media y diversificada. El primero representó 40,0%, efectivo desde el 12 de mayo de 2011, el segundo incremento (8,0%) vigente desde el 1° de enero de 2012 y el último, a partir del 1° de julio de éste año, incorporó 8,0% de aumento salarial.
Además, se observó que algunas empresas otorgaron incrementos salariales con base a políticas propias sobre sueldos y salarios.
Al examinar el IRE por sectores privado y gobierno, se observó que las remuneraciones de los trabajadores del sector privado aumentaron 7,5%, mientras que el sector gobierno reportó una variación del 5,5%, en favor de sus trabajadores.
En detalle el IRE del sector privado por actividades económicas, reflejó que los mayores incrementos en las remuneraciones se observaron en: Suministros de Electricidad, gas y agua (33,0%), Enseñanza (12,8%), Comercio (8,5%), Hoteles y restaurantes (7,7%), Transporte, almacenamiento y comunicaciones (7,3%), Construcción (7,1%), Industria manufacturera (6,4%), Actividades inmobiliarias (6,1%), Intermediación financiera (4,1%), Otras actividades de servicios (3,3%) y Servicios sociales y de salud (2,6%).
Al precisar los resultados del IRE del sector privado por grupos ocupacionales, los aumentos de las remuneraciones favorecieron a las agrupaciones de: Trabajadores no calificados (10,8%), Empleados de oficina (8,1%), Oficiales y operarios (8,1%), Profesionales y científicos (7,7%), Personal directivo (6,9%), Trabajadores de los servicios y vendedores de comercios (6,1%), Operadores de instalaciones (6,0%), Técnicos y profesionales medios (5,3%).
En lo concerniente al IRE por grupos ocupacionales del sector gobierno, los incrementos observados fueron los siguientes: Trabajadores no calificados (9,5%), Empleados de oficina (7,6%), Personal directivo (6,1%), Técnicos y profesionales medios (5,9%), Profesionales, científicos (4,1%), Trabajadores de los servicios y vendedores de comercios, Oficiales y operarios y Operadores de instalaciones no presentaron variación en el presente período.
Con estos resultados, la variación acumulada del IRE se ubicó en 21,0% a nivel general, y por sectores alcanzó 23,0% en privado y 17,2% en gobierno.
Finalmente, en el tercer trimestre del año 2012, el precio relativo del Índice de remuneraciones de los asalariados (IRE) respecto al Índice nacional de precios al consumidor del área metropolitana de Caracas (INPC-AMC), continúa una notable recuperación, al incrementarse en 3,0% puntos porcentuales y pasar de 86,7% a 89,3%. Este resultado es consecuencia directa de la desaceleración observada éste año en los precios de bienes y servicios, aunado a los incentivos de la política de salario mínimo que ha permitido restablecer el poder adquisitivo de las remuneraciones de los asalariados, a niveles más altos que los observados desde el año 2009.
