El Sistema comienza 2015 con dinamismo, siguiendo el impulso de las resoluciones de la XIII Cumbre del ALBA-TCP
El Consejo Monetario Regional del Sistema Unitario de Compensación Regional de Pagos (SUCRE) inauguró 2015 con una reunión de su Directorio Ejecutivo, el pasado miércoles 28 de enero en Caracas. Con la certeza de los objetivos cumplidos en cinco años de operaciones y el impulso brindado por la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), se mantiene la propuesta de consolidación del mecanismo para seguir canalizando el comercio intrarregional.
Consejo Monetario Regional (CMR) en 2015 estuvieron presentes los directores ejecutivos, en nombre de los países miembro: Eudomar Tovar (presidente del CMR y representante por Venezuela), Ramiro Lizondo (Bolivia), Ovidio Reyes (Nicaragua), Benigno Regueiro (Cuba) y Esteban Melo (director suplente por Ecuador). En retrospectiva, el Consejo Monetario Regional realizó un balance positivo de lo que ha sido el desarrollo del SUCRE, desde que entró en vigor el Tratado Constitutivo del Sistema Unitario de Compensación Regional de Pagos, el 27 de enero de 2010, hasta la actualidad.
Se presenta como un éxito el rápido crecimiento de las operaciones y los montos intercambiados en sus primeros tres años, de 10 millones de sucres en 2010, a más de 850 millones en 2012. Esto, tomando en cuenta que el mundo y parte de la región aún se encontraban en global. En ese sentido, el SUCRE cumplió uno de sus objetivos fundamentales: sostener el comercio entre los países latinoamericanos.
El SUCRE, además, lleva puesto el sello del ALBA, es decir, de la genialidad alternativa impulsada por los presidentes Hugo Chávez, Fidel Castro, Rafael Correa, Evo Morales, Daniel Ortega y Manuel Zelaya. El ímpetu transformador de la economía que enarbolaron estos mandatarios, rápidamente se encontró con fervientes oponentes que procuraron estigmatizarlo. No obstante, el Consejo Monetario Regional, en colaboración con las autoridades financieras, comerciales y aduaneras de los Estados parte, ha venido perfeccionando el Sistema y su capacidad preventiva, consolidando la confianza de los usuarios regionales en sus bondades operativas.
Con un 93% del total de las operaciones del SUCRE desde el año 2010, las empresas privadas no han tenido reparo en adoptar las ventajas de un Sistema que permite bajos costes transaccionales, tiempos de tramitación óptimos y liquidación en plazos breves, diversas opciones que atraen a los empresarios deseosos de comerciar con seguridad para sus pueblos. También lucen prometedoras las solicitudes de adhesión de otros países, como la República Oriental del Uruguay en 2013 (se encuentra en proceso de ratificación ante su Parlamento).
En los últimos dos años, el conjunto de adecuaciones ha llevado el comercio transado por el SUCRE a niveles más modestos. De ahí que el Directorio Ejecutivo se plantea para el año 2015 el reto de estimular en los países miembros un uso del Sistema cada vez más bidireccional con cada uno de sus socios, de manera que los saldos intrarregionales de comercio tiendan a equilibrarse, y se estimule el desacoplamiento progresivo del dólar. De esta manera, el crecimiento cuantitativo del monto operado a través del SUCRE se completaría con el mandato cualitativo de renovar el comercio intrarregional desde una perspectiva equilibrada, complementaria y de beneficio compartido.
Objetivos estratégicos
De esta forma, se desarrolla la hoja de ruta para el siguiente quinquenio del SUCRE (2015-2020), durante el cual, ante un contexto económico mundial aún signado por la incertidumbre, es pertinente posicionar y defender los principios fundacionales de la economía política del Sistema Unitario de Compensación Regional como son la cooperación, la solidaridad y el respeto a la soberanía. Para avanzar en este cometido se darán pasos importantes en los siguientes aspectos:
- Afirmar la necesidad de cooperar de forma multilateral con sistemas de pago qu8e suavicen las presiones financieras sobre las balanzas de pago.
- Progresar en materia de complementación productiva, comercial y monetaria, mediante el respeto a la soberanía de cada país. Con esto se busca apuntar a la vez al sueño de formalizar más instrumentos y edificaciones comunes de nuestra patria grande latinoamericana y caribeña.
Estas son tareas planteadas para el CMR en 2015, inscritas en la línea de las resoluciones adoptadas en la XIII Cumbre del ALBA-TCP, celebrada el pasado mes de diciembre de 2014 en el marco de sus 10 años, y los lineamientos del próximo Consejo Económico del ALBA, que se celebrará en la ciudad de La Habana el próximo mes de marzo.
Breve cronología de una propuesta exitosa
El Sistema Unitario de Compensación Regional de Pagos (SUCRE) fue propuesto el 26 de noviembre de 2008 en la ciudad de Caracas durante la cumbre ALBA-TCP y se hizo realidad en solo 13 meses. Así, en febrero de 2010 Venezuela y Cuba realizaron la primera operación comercial y desde entonces el intercambio ha sido fluido. Conformado por Bolivia, Cuba, Ecuador, Nicaragua y Venezuela, y operativo desde febrero de 2010, el SUCRE ha despertado el interés en otros Estados de la región (Uruguay). Ofrece, entre otros beneficios, el acceso a un mercado ampliado de aproximadamente 70 millones de personas, la incorporación de pequeñas y medianas empresas (exportadoras e importadoras) públicas y privadas, la reducción de costos transaccionales, la liquidación de operaciones en tiempo real, la optimización del flujo de caja, la disminución de precios de los bienes transados y la agilización de los trámites administrativos para pagos internacionales.