El Instituto desarrolla una política social, económica, diamantífera y aurífera integral para la región sur
Conscientes de la importancia estratégica del estado Bolívar, un territorio favorecido con enormes riquezas naturales al sur del país, las autoridades del Banco Central de Venezuela (BCV) adelantan pasos en firme para la ejecución de una política social, económica, diamantífera y aurífera integral, que tomará en cuenta la producción, refinación, comercialización y transformación del diamante y el oro. Esta iniciativa se fundamenta en la reforma legal oficializada en noviembre de 2014, mediante la cual se faculta a la autoridad monetaria para fortalecer y acrecentar las reservas internacionales de la república con metales y piedras preciosas.
Por ello, el BCV emprendió el proyecto de Desarrollo Integral Social e Industrial del Diamante, que arrancó con las actividades desplegadas en el sector de Guaniamo, ubicado en el municipio Cedeño de Bolívar, zona con grandes potencialidades para la actividad diamantífera. Este esfuerzo asume como punto focal el desarrollo humano e integral de toda la población bolivarense.
Igualmente, con esta actuación se da cumplimiento al tercer objetivo histórico del Plan de la Patria, según el cual las instituciones del Estado deben contribuir a hacer de Venezuela “un país potencia en lo social, lo económico y lo político”. Pero por el resguardo del medio ambiente, se trabajará con apego al quinto objetivo histórico del mismo documento legal, cuando se señala que “debe contribuirse con la preservación de la vida en el planeta y la salvación de la especie humana”.
La gente es primero
Siguiendo la visión legada por el Comandante Eterno, Hugo Chávez, la reactivación de la actividad diamantífera en Guaniamo tiene como prioridad lo social, para contribuir a mejorar las condiciones y la calidad de vida de sus habitantes. Siguiendo los lineamientos metodológicos de la teoría del Punto y Círculo, orientada precisamente a territorializar en espacios claramente definidos, mediante diagnósticos previos, las acciones necesarias de la lucha popular. Este planteamiento permite que en cada lugar, con responsables determinados, se desarrollen acciones
para generar el impacto esperado y así profundizar y acelerar la Revolución Bolivariana, destinada a generar la mayor suma de felicidad posible para todos y todas.
Por ello, en esta primera fase del proyecto el BCV realizó la coordinación para conformar un equipo interinstitucional, con aquellos entes con competencia para el desarrollo integral de este sector, como la Guardia Nacional Bolivariana, la Gobernación de Bolívar y los ministerios del Poder Popular de Petróleo y Minería; para Vivienda y Hábitat; para Transporte Terrestre y Obras
Públicas; para los Pueblos Indígenas; para las Comunas y los Movimientos Sociales; para la Salud; para la Alimentación; y para Agricultura y Tierras; además de otros organismos, como el Instituto Nacional de Geología y Minería (Ingeomin); la Misión Piar; el Sistema Nacional de Misiones; Fundacredesa; la alcaldía de Cedeño; el Consejo Federal de Gobierno; la Fundación para el Desarrollo del Servicio Eléctrico; el Poder Popular organizado; el Instituto de Salud Pública de Bolívar; el Frente de Campesinos Simón Bolívar; los Círculos Bolivarianos Campesinos y el Consejo Nacional Electoral.
En tal sentido, el economista y director del BCV, José Khan Fernández, coordinó las reuniones necesarias con el ministro de Petróleo y Minería, Asdrúbal Chávez; el titular de la cartera de Vivienda y Hábitat, Ricardo Molina; el ministro de Transporte y Obras Públicas, Haiman El Troudi; la ministra de Pueblos Indígenas, Aloha Núñez y el viceministro de las Comunas, Alexis Toledo, a fin de articular los encuentros necesarios para desarrollar un plan de abordaje en Guaniamo que se ejecutó en 10 días con la participación de 60 personas.
Este primer acercamiento rebasó todas las expectativas porque facilitó la conformación de mesas de trabajo en cada una de las comunidades con la activa participación del Poder Popular, lo que permitió conocer en detalle la problemática y establecer una priorización, de acuerdo con las necesidades de los propios afectados. Esto permitió elaborar el diagnóstico general de la zona inspeccionada y atender los aspectos socioeconómicos de 820 personas, que representan aproximadamente 180 familias que viven en Gran Alianza, Tiro Loco, El Milagro y La Salvación.
Asimismo, un equipo de médicos trabajó con toda la población (niños, jóvenes y adultos), mediante la realización de jornadas de vacunación, atención médica primaria, levantamiento epidemiológico y un plan antropométrico para evaluar la calidad de la nutrición y las medidas de crecimiento de los habitantes.
Además, el sector de Guaniamo abarca otras siete comunidades que no cuentan con yacimientos diamantíferos en su circunscripción, pero que son consideradas para la segunda etapa de este plan, lo que incluye el impulso de proyectos socioproductivos vinculados con otras actividades económicas, como agricultura, ganadería, piscicultura y producción de cacao, este último considerado uno de los mejores de Venezuela.
Desarrollo técnico-minero
La labor que adelantan los especialistas de este equipo interinstitucional involucrará tareas de certificación de yacimientos, dado que en tierras bolivarenses se producen las tres clases de diamantes reconocidas ampliamente en el mercado internacional, como son el de calidad industrial (se emplea para la fabricación de instrumentos de perforación y terrajas), de calidad para talla (sirve para la creación de gemas preciosas) y el tipo bort (se utiliza para la elaboración de polvo de diamante).
La fase técnico-minera comprenderá la actualización de todas las poligonales y los frentes de explotación de yacimientos que anteriormente habían sido aprovechados. Esto permitirá la visita de revisión por parte del Sistema de Certificación de Procesos Kimberley (SCPK), con la intención de que Venezuela ingrese a dicho sistema internacional.