Andrés Briceño viene cargado de ritmos afrovenezolanos
Andrés Briceño comenzó en la percusión a la temprana edad de cuatro años, bajo la guía de su padre, Napoleón Baltodano, un trompetista de varias orquestas centroamericanas y uno de los primeros improvisadores de jazz en Venezuela. Autodidacta, Briceño ha tocado con muchos artistas en diferentes estilos musicales. Sus raíces lo han conducido al estudio de los ritmos afrovenezolanos y su principal interés se ha centrado en adaptar la percusión de esas manifestaciones a la batería. En 1996 grabó su hasta ahora único disco, "Gratitude", en el que se aprecia el resultado de sus años de investigación musical.
Así se comprimen los principales datos biográficos de Andrés Briceño, el baterista que el próximo miércoles, a partir de las cuatro de la tarde, estará junto con su banda en la plaza Juan Pedro López, en el concierto que cierra la programación cultural del Banco Central de Venezuela correspondiente al primer trimestre del año.
Briceño, quien se ha destacado como un ejecutante de jazz, ha tocado con el saxofonista cubano Paquito D’Rivera y con su compatriota trompetista, Arturo Sandoval, así como con Dave Valentín y Don Grusin. Además ha participado en más de 60 grabaciones de músicos venezolanos, entre ellos, Gerry Weil, Alfredo Naranjo, María Rivas, Nancy Toro y Roque Valero. Su investigación sobre la tradición musical afrovenezolana la ha difundido no sólo musicalmente con sus interpretaciones, sino también a través de seminarios realizados en el país y en el exterior.