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El PIB aumentó 8,9% durante el segundo trimestre de 2007

Fecha: 
Martes, 14 Agosto 2007

 

Décimo quinto trimestre consecutivo de crecimiento armónico, sostenido y significativo de la economía venezolana

El PIB aumentó 8,9% durante el segundo trimestre de 2007

 

Estimaciones preliminares indican que el Producto Interno Bruto (PIB) a precios constantes registró una variación de 8,9% en el segundo trimestre de 2007, respecto a igual período del año anterior, lo cual añadido al crecimiento de 9,1% observado en los tres primeros meses determina una expansión de 9,0% en el primer semestre.  Este resultado consolida el proceso de crecimiento armónico, sostenido y significativo que se ha observado por quince trimestres consecutivos, en los cuales el incremento promedio se ubica en 12,4%.

 

El dinamismo reseñado en la actividad económica en el segundo trimestre de 2007, continúa  estimulado por la mayor demanda agregada interna, tanto en gastos de inversión como de consumo, producto de mayores posibilidades de acceso a financiamiento, al sostenimiento de los programas sociales del gobierno, a la inversión en infraestructura por parte de los sectores privado y público y al mayor ingreso real de los hogares.

 

Se debe destacar que este comportamiento se da en un escenario signado por la adopción de políticas económicas por parte del ejecutivo nacional, en coordinación con el Banco Central, con el objeto de estabilizar los precios de la economía.

 

El sector privado sigue aportando el mayor efecto dinamizador en el crecimiento del PIB, cuyo nivel de actividad se expandió en 11,1%; por su parte, el sector público creció en 2,0%.

 

Actividades económicas:

El auge de la actividad no petrolera, al crecer en 10,8%, contribuyó de forma significativa al comportamiento favorable de la actividad económica en el segundo trimestre.  En sentido contrario, el valor agregado bruto (VAB) de la actividad petrolera disminuyó en 3,9%.

 

Actividad petrolera:

El resultado observado en la actividad petrolera en el segundo trimestre, con respecto a similar período del año anterior, es consistente con el acuerdo de reducción de la cuota OPEP, lo cual incidió en los resultados del valor agregado del sector petrolero privado, al reflejar una disminución de 11,6%; por su parte el sector público mostró una contracción de 2,3%.

 

Actividad no petrolera:

El crecimiento de 10,8% observado en la actividad no petrolera obedece al mayor aporte del sector privado, con una expansión de 12,1%. Entre las principales actividades que contribuyeron a este resultado destacan: la industria manufacturera (8,2%), el comercio (17,9%), los servicios de transporte (14,8%) y las comunicaciones (28,0%).  Asimismo,  mostraron cifras favorables los sectores impulsores, cuyo crecimiento impacta la demanda del resto de las actividades económicas, tales como la construcción (15,5%) y los intermediarios financieros (20,5%).

 

El resultado reseñado en la actividad no petrolera fue estimulado por la mayor demanda agregada interna, favorecida por la recuperación del ingreso familiar y el poder adquisitivo del salario de los hogares, el mayor nivel de empleo, la continuidad en los programas sociales del gobierno y la ejecución del plan de inversiones públicas.

 

 

Industria manufacturera:

La industria manufacturera privada mostró un crecimiento de 8,9%, con lo que mantuvo el ritmo expansivo iniciado a finales de 2003. Este dinamismo estuvo motorizado principalmente por los significativos aumentos en el valor agregado de la mayoría de las ramas, especialmente en productos de caucho y plástico (28,3%), fabricación de minerales no metálicos (15,8%), productos elaborados de metal (15,6%), alimentos, bebidas y tabaco (13,7%), fabricación de metales comunes (12,5%), fabricación de sustancias y productos químicos (8,0%) y fabricación de vehículos (4,3%).

 

Resalta por su importante incidencia sobre el valor agregado bruto manufacturero, la expansión acelerada observada en la industria alimenticia, como respuesta del aparato productivo nacional para atender la creciente demanda de consumo.  Esta actividad ha crecido en forma sostenida desde el segundo trimestre de 2005 (12,4% en promedio), destacando las ramas relacionadas con la elaboración de azúcar (36,4%), de bebidas no alcohólicas (26,8%), productos de panadería (19,8%), trillado y molienda de trigo (15,6%), productos lácteos (14,6%) y producción, procesamiento y conservación de carnes y derivados (9,8%).

 

 

Construcción:

La actividad construcción registró un incremento de 15,5% en el trimestre, impulsado por el aumento de las obras no residenciales y residenciales, demandadas por el sector privado (18,7%) y por el sector público (12,7%).  Con este comportamiento, el promedio de crecimiento en los últimos catorce trimestres se ubica en 26,2%, que por tratarse de un sector altamente empleador de mano obra, impacta positivamente el nivel de ocupación de la economía.

El crecimiento experimentado por el sector privado obedece a obras de carácter no residencial, asociadas a la construcción de centros comerciales y hoteles, en las principales ciudades del país.

La construcción demandada por el sector público se expandió por efecto de los requerimientos de obras del gobierno general (10,1%) y de las empresas públicas (16,4%), asociados a la construcción de importantes obras de vialidad, infraestructura, riego, educación, salud y seguridad y defensa, con recursos financieros provenientes principalmente del Fondo de Desarrollo Nacional (Fonden).

 

Productores de servicios del gobierno general:

La prestación de servicios por parte del gobierno continúa mostrando una tendencia al crecimiento (5,2%), como reflejo del compromiso social con la población, atribuible particularmente a garantizar una mayor prestación de servicios de administración pública y defensa (5,6%), enseñanza (5,5%) y salud (1,5%). 

 

Comercio:

El valor agregado de la actividad comercial registró una variación puntual de 17,9% en el período reseñado, con lo cual se mantiene la tendencia positiva iniciada en el cuarto trimestre de 2003, originado por el incremento de 6,2% en la oferta de bienes transables de origen nacional y de 35,5% en la importada.

 

 

OFERTA Y DEMANDA GLOBAL

La oferta agregada se expandió en 15,6% en el segundo trimestre de 2007, como consecuencia del significativo crecimiento registrado en el Producto Interno Bruto (8,9%) y en las importaciones (32,9%).

 

La demanda global creció debido al aumento observado en los diferentes componentes de la demanda agregada interna: gasto de consumo final privado (18,8%), gasto de consumo final del gobierno general (5,4%) e inversión bruta fija (27,0%).  Por otra parte, en las exportaciones no petroleras de bienes se observó un leve crecimiento.

 

El dinamismo mostrado por el gasto de consumo final privado continúa favorecido por la recuperación del ingreso de los hogares, el mantenimiento de las transferencias del gobierno a los sectores de menores recursos mediante los programas sociales, la generación de empleos, el aumento en las remuneraciones medias en términos reales y la mayor utilización del crédito.  El gasto de consumo final del gobierno general mantiene la tendencia expansiva iniciada en el año 2003.

 

Por su parte, la tasa de expansión de la inversión bruta fija se constituyó en la más significativa de la demanda al ubicarse en 27,0%, lo cual es consistente con el importante monto de obras de infraestructura productiva y social contratadas por el gobierno general y el sector privado, así como con el nivel de las importaciones de maquinarias y equipos para la industria nacional.

 

El Banco Central de Venezuela, consecuente con la responsabilidad indelegable frente a la sociedad y el país, expresa nuevamente su compromiso, en el marco de la coordinación macroeconómica y del principio de responsabilidad pública, de continuar propiciando las condiciones de estabilidad necesarias para mantener y consolidar el desarrollo armónico de la economía, indispensable para alcanzar el bienestar social del país.

 

En este sentido, la Reconversión Monetaria constituye, sin duda alguna, un elemento positivo que acompaña esta senda de crecimiento económico, así como genera confianza en el signo monetario y expectativas favorables en la población.