Crecimiento sostenido y significativo de la economía venezolana por Veintiún trimestres consecutivos

De acuerdo con estimaciones preliminares, el Producto Interno Bruto (PIB) a precios constantes creció un 3,2% en el cuarto trimestre de 2008, respecto a similar período del año anterior.  Este aumento, junto al 5,4% registrado para el lapso enero-septiembre determina una expansión de 4,8% para el año 2008.  Con dicho comportamiento, se completan veintiún trimestres continuos de aumento significativo del nivel de actividad económica.

 

Actividades económicas:

El desempeño económico en el cuarto trimestre estuvo estimulado por un alza de 3,6% en la actividad no petrolera; la actividad petrolera, por su parte, registró una variación positiva de 0,1%.

 

Actividad petrolera:

El menor ritmo de crecimiento mostrado por la actividad petrolera en el cuarto trimestre estuvo afectado por la política de recortes a la producción adoptada por la OPEP, en la cual a nuestro país le correspondieron 129.000 barriles diarios.  No obstante, en todo el año 2008 la actividad petrolera experimentó un alza de 3,2%, como resultado de  crecimientos de 3,4%, 3,3% y 6,0% en los primeros tres trimestres del año, asociados al aumento sostenido de la producción de crudos, tanto por la estatal petrolera como por las empresas mixtas; ello permitió un mayor volumen de ventas externas.

 

Actividades no petroleras:

Los principales crecimientos observados en el valor agregado no petrolero, en el cuarto trimestre, se dieron en: comunicaciones (12,7%); servicios comunitarios, sociales y personales (7,9%); electricidad y agua (4,2%); servicios del gobierno (6,8%) y agricultura (3,1%).

 

Este comportamiento favorable en la actividad no petrolera fue propiciado por el aumento de la demanda agregada interna, que a su vez fue favorecida tanto por la expansión de los principales programas sociales del gobierno a nivel nacional como por el mayor nivel de empleo.

 

Industria manufacturera:

La industria manufacturera privada mostró una leve contracción de 0,5% en el cuarto trimestre de 2008; no obstante, en el año experimentó un crecimiento de 1,3%, con resultados apreciables en fabricación de papel (6,2%), productos elaborados de metal (2,7%) y en la industria de alimentos (4,1%).  Esta última actividad refleja los esfuerzos que se realizan para atender la expansión del consumo interno de bienes alimenticios, que mantiene su dinamismo.

 

Construcción:

En la actividad construcción privada se apreció una ligera contracción de 0,3% en el cuarto trimestre de 2008, motivado a  una  menor  demanda  de  obras  por  parte del  sector privado (-3,0%), principalmente de carácter residencial, ya que en el componente de obras demandadas por el sector público se experimentó un aumento de 1,7%, impulsado por crecimientos de 2,3% y 0,8% en gobierno general y empresas públicas, respectivamente.

 

Se debe destacar que en el año 2008 la actividad construcción creció en un  4,5%, impulsada por la ejecución de obras, tanto residenciales como no residenciales, en los tres primeros trimestres del año.

 

Sectores institucionales:

Desde el punto de vista institucional, la variación puntual del valor agregado bruto (VAB) del sector público en el cuarto trimestre (11,5%), refleja la recomposición que se ha producido en la actividad económica, producto de la política de nacionalización de empresas.  En el marco de esta política de estado, el sector público experimentó un crecimiento de 16,4% en el año 2008.

 

Productores de servicios del Gobierno general:

Los servicios que produce el Gobierno general mantuvieron la tendencia favorable que se observa desde inicios de 2003, al crecer en 6,8%, derivado de la mayor prestación de servicios de administración pública y defensa (10,5%), de salud (2,6%) y de enseñanza (1,8%), los cuales satisfacen directamente las necesidades de la colectividad venezolana, en particular las de los sectores de menor capacidad adquisitiva.

 

Finalmente, se debe señalar que los resultados positivos obtenidos en el trimestre se producen en un entorno internacional marcado por una severa crisis financiera que genera gran incertidumbre en los agentes económicos, ante el evidente proceso recesivo en las principales economías del mundo.

 

En este complejo contexto, el Banco Central de Venezuela ha adecuado sus capacidades institucionales para la coordinación macroeconómica con el Ejecutivo Nacional, con miras a impulsar las políticas que aseguren el dinamismo y la sustentabilidad en el desarrollo económico, como medio para satisfacer las necesidades colectivas, promover la equidad y propiciar el desarrollo humano integral de la población venezolana.